1) Pretratamiento: En la línea de agua, mediante rejas y tamices, se eliminan los grandes sólidos que transporta (como latas, bolsas, bastoncillos, toallitas, entre otros elementos). Seguidamente, se inicia un tratamiento primario, donde se eliminan los sólidos en suspensión, que son fácilmente decantables en grandes piscinas.

2) A continuación, se realiza un tratamiento secundario en grandes depósitos, donde se elimina la contaminación por materia orgánica del agua. En esta fase, el agua pasa por los desarenadores, para la eliminación de las arenas y las grasas.
La EDAR Baix Llobregat usa tratamientos de digestión
aeróbica y anaeróbica, mediante los cuales los
microrganismos metabolizan y, por lo tanto, eliminan
la materia orgánica presente en el agua.


3) Tratamiento terciario para la reutilización del agua tratada. Es posible dar un paso más para impulsar el uso de agua regenerada mediante el empleo de métodos que combinan diferentes disciplinas. Incluye un pretratamiento (para eliminar la mayor cantidad de sólidos posibles), una decantación, una microfiltración y el uso de lámparas ultravioleta e hipoclorito de sodio (para eliminar, por ejemplo, posibles patógenos).

4) Planta de ósmosis para la barrera contra la intrusión salina en el acuífero. La calidad del agua obtenida es tan alta que se puede infiltrar en el acuífero del Llobregat sin efectos negativos. La capacidad máxima de producción de agua regenerada es de 315.000 m3 al día para distintos usos, como riego agrícola, uso ambiental, usos municipales, usos industriales y un largo etcétera.

Además de la línea de aguas, la EDAR Baix Llobregat también tiene una línea de fangos (o lodos), donde van a parar todos los fangos de microorganismos que han actuado en la línea de agua, así como los sólidos en suspensión fácilmente decantables resultantes del tratamiento primario. Todo ello se espesa y se digiere
(se introduce durante un mes en unos depósitos cerrados con
unos microorganismos que convierten estos
lodos en una materia inerte, sin patógenos,
y apta para ser manipulada por los humanos).
Luego se deshidrata en unas máquinas centrífugas,
para facilitar y ahorrar en su transporte, y el
resultado puede ser utilizado en la agricultura
como abono.

En la digestión realizada en la línea de fangos se genera metano, un gas natural pobre, que puede almacenarse y tratarse en unos motores de cogeneración para producir energía eléctrica, que se usa en la propia depuradora para que esta sea autosuficiente. El 40% de la energía que se necesita para depurar, se puede extraer de la digestión del fango. Este es un paso para hacer realidad el cambio
de paradigma hacia unas instalaciones totalmente
autosuficientes y, por tanto, plenamente alineadas
con la economía circular. Además, del propio
funcionamiento de los motores de cogeneración se desprende
energía térmica (pues los gases salen a 400 °C), que
se aprovecha para calentar o deshidratar
el fango en diferentes fases.

Es la depuradora más completa del área metropolitana. Posee una capacidad de tratamiento de 260 millones de litros diarios (lo equivalente a 104 piscinas olímpicas). El agua le llega con todo tipo de residuos después de haber sido utilizada en los hogares, en las empresas, en las calles... 

Cerrar el círculo

Estación Depuradora de Aguas Residuales del Baix Llobregat

Es la depuradora más completa del área metropolitana. Posee una capacidad de tratamiento de 260 millones de litros diarios (lo equivalente a 104 piscinas olímpicas). El agua le llega con todo tipo de residuos después de haber sido utilizada en los hogares, en las empresas, en las calles...  En la línea de agua, mediante rejas y tamices, se le quitan primero los grandes sólidos (desde latas, a palés de madera, cajas, bolsas, bastoncillos, toallitas o preservativos, entre otros elementos que configuran la antropología urbana). Seguidamente, se inicia un tratamiento primario, donde se eliminan los sólidos en suspensión, que son fácilmente decantables en grandes piscinas. A continuación, se realiza un tratamiento secundario en grandes depósitos, donde se elimina la contaminación por materia orgánica del agua.
Es posible dar un paso más para impulsar el uso de agua regenerada mediante el empleo de métodos que combinan diferentes disciplinas. “Si queremos fomentar la reutilización del agua, es necesario realizar un tratamiento terciario al agua, de afine, que incluye un pretratamiento (para eliminar la mayor cantidad de sólidos posibles), una decantación “lamelar lastrada” según el argot técnico, una microfiltración y lámparas ultravioleta e hipoclorito de sodio (para eliminar, por ejemplo, posibles virus). “El resultado ya no es un agua buena, sino excepcional”, garantiza Javier Santos, director de Explotación y Saneamiento de Aigües de Barcelona. 
“Entre los usos que puede tener el agua regenerada está la limpieza de calles o de los equipos de refrigeración de las industrias. También se puede emplear en el mantenimiento del caudal ecológico del río o puede destinarse a los humedales del delta del Llobregat... E incluso se podría suministrar agua a la ETAP de Sant Joan Despí para que la potabilizara y fuera apta para el consumo humano, lo que permitiría cerrar el ciclo completamente”, explica el director de Explotación y Saneamiento de Aigües de Barcelona. “No me cabe duda de que en 10 o 15 años estaremos alimentando directamente potabilizadoras con el agua saliente de las depuradoras”, añade Santos.En el caso de la EDAR Prat existe incluso un último tratamiento denominado ‘cuaternario’, que posee membranas de ultrafiltración y de ósmosis inversa (como existen en una potabilizadora), con la que “fabricamos un agua destilada hiperpura, que sirve para inyectarla en 14 pozos diseminados por el litoral barcelonés para crear una especie de barrera que evite la intrusión salina del mar en los acuíferos”, concluye Santos. Una técnica que sirve para demostrar que la acción del hombre, y la inteligencia aplicada al agua, puede jugar a favor del medio ambiente y servir para combatir, en este caso, la salinización de esas fuentes naturales de agua dulce que constituyen los pozos subterráneos. Además de la línea de aguas, la EDAR Prat también tiene una línea de fangos (o lodos), donde van a parar todos los microorganismos que han actuado en la línea de agua, así como los sólidos en suspensión fácilmente decantables resultantes del tratamiento primario. Todo ello se espesa y se digiere (se introduce durante un mes en unos depósitos cerrados con unos microorganismos que convierten estos lodos en una materia inerte, sin patógenos, y apta para ser manipulado por los humanos). Luego se deshidrata en unas máquinas centrífugas, para facilitar y ahorrar en su transporte, y el resultado puede ser utilizado en la agricultura como abono.En la digestión realizada en la línea de fangos se genera metano, un gas natural pobre que puede almacenarse y tratarse en unos motores de cogeneración para producir energía eléctrica, que se vende a la red. “En nuestro caso, el 40% de la energía que necesitamos para depurarla podríamos extraer de la digestión del fango”, concluye Santos. Un paso para hacer realidad el cambio de paradigma hacia unas instalaciones totalmente autosuficientes y, por tanto, plenamente alineadas en la economía circular. Cerrar el círculoCASO PRÁCTICO: EDAR Prat